Fuera de coñas, la verdad es que este descubrimiento de Dani la verdad es un gran local para tomarse un Gin Tonic y el camarero tarda aprox. 1'45" (cronometrados) en verter la tónica y todavía se mosquea porque la ha servido muy rápido.
En la foto: Martin Miller con Fever Tree y Bulldog con Schweppes de Cardamomo.